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abril 21, 2015

Creciendo en la Oscuridad


       Buen día, 

el pensamiento de este día es de un autor español del siglo XVI, llamado Juan de la Cruz quien trabajó para que la iglesia católica de entonces se reformara.  Por esta razón fue arrestado.  Durante su confinamiento escribió su obra más famosa "La Noche Oscura del Alma" de donde viene este pensamiento (esta es una traducción, pues no tengo acceso al texto en español).

       En estas circunstancias adversas y de dolor, Juan entiende que es por la voluntad de Dios y para su bien el que atraviese por todo esto.  Espero sea útil, especialmente para aquellas personas que estén atravesando por momentos difíciles - su propia noche oscura - y que ayude a mantener viva la esperanza y la confianza de la sabia soberanía de nuestro Padre.  Y para quien no esté pasando por circunstancias difíciles, que sirva para que cuando éstas lleguen, estén preparados para enfrentarlas.  




       "En cierto punto en el transitar espiritual Dios atraerá a una persona de un estado inicial a uno más avanzado.  En este punto, la persona comenzará a involucrarse en ejercicios religiosos y crecer más profundamente en la vida espiritual.

       Muy probablemente estas almas experimentarán algo que es conocido como 'la noche oscura del alma.'  La 'noche oscura' es cuando una persona pierde todo el placer que alguna vez experimentó en su vida devocional.  Esto sucede porque Dios quiere purificarlos y mudarlos a mayores alturas.


       Después de que un alma ha sido convertida por Dios, esa alma es alimentada y cuidada por el Espíritu. Como una madre amorosa, Dios cuida y conforta el alma infantil alimentándola con leche espiritual.  Estas almas encontrarán gran deleite en esta etapa.  Ellas comenzarán a orar con gran fervor y perseverancia; ellas se involucrarán en todo tipo de actividades religiosas por el gozo que encuentran en practicarlas.  



       Pero vendrá un tiempo en el que Dios los hará crece con más profundidad.  Él quitará el consuelo previo que tenía el alma para enseñarle virtud y prevenir que desarrolle vicios...

       Entonces, que baste decir que Dios percibe las imperfecciones en nosotros, y por su amor a nosotros nos urge a que crezcamos.  Su amor no está contento si nos deja en nuestra debilidad, y por esta razón nos lleva a la noche oscura.  Por eso nos desteta de todos los placeres y nos da tiempos de sequía y oscuridad interior.


       Al hacerlo, Él puede remover todos estos vicios y crear virtudes dentro de nosotros.  A través de la noche oscura, el orgullo se vuelve humildad; la avaricia se vuelve simpleza; el odio se vuelve contentamiento; los lujos se vuelven paz; la glotonería se vuelve moderación; la envidia se vuelve gozo y la pereza se vuelve fortaleza.  Ninguna alma crecerá profundamente en la vida espiritual a menos que Dios trabaje pasivamente en esa alma por medio de la noche oscura."

      Saber que todas las cosas ayudan para el bien de todas las personas que aman a Dios (Rm 8:28), nos invita a tener confianza en medio de las más oscuras circunstancias.  No sólo saber que Dios lo permite - y algunas veces lo ordena - para que podamos crecer espiritualmente al conocerlo mejor.


      También nos debe confortar la idea de que las "noches oscuras" no son otra cosa, sino resultado del amor de nuestro Padre para que lleguemos a ser maduros en Él y para Él.

Recibiendo el consuelo divino

Guillermo Bernáldez



abril 08, 2015

Sirviendo con Gozo

       Saludos, 

el pensamiento de esta semana lo encontré en el blog de un amigo.  Me pareció que era muy apropiado porque el mundo nos rodea de ideas y tentaciones que intentan desanimarnos, haciéndonos pensar que nuestro servicio a Dios es algo que no tiene sentido, que va en contra de la lógica de un mundo cada vez más sumergido en diversión y entretenimiento pasajeros. 

        Sin embargo, cuando Dios cambia el corazón de unapersona, también cambia la forma en la que ve el mundo, y más que nada, cambia el concepto de la finalidad del ser humano, de la temporalidad de esta vida y de la promesa de vivir eternamente con nuestro Padre. 

       El autor es Thomas Watson (1620-1686), un puritano inglés que ha sido de inspiración para muchas personas, incluyendo a Charles Spurgeon.  Espero que lo sea para ti.




       “Dios se llena de gozo cuando el mundo ve a un cristiano que es alegre en medio de circunstancias adversas; quien, con el zorzal, puede cantar en la oscuridad de la noche de la misma manera que lo hace a la luz del día.  El pueblo de Dios tiene razones para estar alegre.  Están justificados y son adoptados, y esto creo una paz interior, y crea música en sus corazones, sin importar las tormentas exteriores que pudieran estar azotándolos.  Si consideramos lo que Cristo ha hecho por nosotros a través de su sangre, y la obra de su Espíritu, es una razón para tener una gran alegría, y esta alegría glorifica a Dios.


       Un siervo que siempre está triste y desanimado, refleja algo de su señor.  Dice que su vida es dura porque su señor no le da lo que es adecuado.  Cuando el pueblo de Dios está cabizbajo, pareciera que no tienen un buen Señor, o han abandonado su decisión de seguirlo, algo que deshonra a Dios. 
 

       
       Al tiempo que los grandes pecados de aquellos que dicen ser creyentes, escandalizan el evangelio, también lo hacen las vidas de los santos faltas de gozo.  Nuestro servicio a Dios no le da gloria a menos que lo hagamos con gozo.  Un cristiano alegre busca glorificar a Dios.  Nuestra fe no nos quita el gozo, lo refina.  No rompe nuestro violín, sino que lo afina a hace que la música que produce sea más dulce. 


       ‘Ustedes lo aman a pesar de no haberlo visto…(1Pe 1:8a)  




       Dios en deliciosamente bueno.  Aquello que es el bien principal debe llenar el alma con placer.  Debe haber en ella un deleite ferviente y la quintaesencia del gozo.  Hay una dulzura en la persona de Dios que deleita e inflama el alma.  El amor de Dios derrama una dulzura infinita en el alma que es indescriptible y llena de gloria.


       Si nos deleitamos en Dios, aunque sólo lo veamos por fe, ¿cómo será cuando lo veamos cara a cara?  Si los santos encontraron tanto deleite en Dios cuando ellos estaban sufriendo, oh ¡cuánto gozo experimentarán cuando sean coronados!


       Dios es un bien superlativo.  Él es mejor que cualquier cosa con la que se le compare.  Él es mejor que la salud, las riquezas, y el honor.  Estas cosas mantienen la vida, Él da la vida.  ¿Quién podría poner algo en una balanza en la que el otro lado está la Deidad?  ¿Quién podría pesar una pluma contra una montaña de oro?  Dios sobrepasa todas las cosas más infinitamente que el sol ilumina más que la luz de una vela.




       Dios es un bien eterno.  Él es el Anciano de días, aun así nunca decae ni se envejece (Dn 7:9).  El gozo que Él da es eterno, la corona no se desvanece.  El alma glorificada siempre se confortará en Dios, celebrando en su amor, y recibiendo luz y calor en su presencia.  Dios es el bien principal, y el gozo de Dios es el contentamiento más alto que cualquier alma es capaz de conocer.”



       Cuando uno está convencido de esto, es difícil que pierda el sentido de la alegría y gozo por periodos prolongados.  Sabemos que Dios permite que experimentemos dificultades, pero que nunca van a ser superiores a lo que podemos aguantar.  Además  está la promesa de que todo es para nuestro bien. 

       Espero que nuestro Padre nos conceda la convicción de la realidad de sus promesas.  Que en medio de cualquier situación podamos recordar que Dios es fiel y cumple; que es soberano, sabio, amoroso, justo y todopoderoso.  Que a su nombre sea la gloria por siempre. 

       Con la alegría que viene de nuestro amoroso Padre,

Guillermo Bernáldez F